La Cumbre de Jefes de Estado de la Commonwealth concluyó el sábado en Kigali, Ruanda. El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, ha hecho todo lo posible para imponer su apoyo a Ucrania. Pero 18 países, especialmente africanos, se negaron.
Llegado a Kigali el miércoles pasado, el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, anunció que quería "fortalecer la cooperación entre Canadá y África". Para ello, contó con la Cumbre de Jefes de Estado de la Commonwealth (CHOGM 2022). Un evento que fue aplazado dos años debido a la pandemia del Covid-19.
Su celebración en Ruanda, entre el 21 y el 25 de junio, fue una oportunidad paraanunciar la integración de Togo y Gabón en el bloque anglófono.
Luego de varios anuncios, como el del estatus de observador permanente de Canadá ante la Unión Africana (UA), así como el de la creación de una comisión especial Ruanda-Canadá, el primer ministro Trudeau inició una serie de 20 encuentros. Objetivo: convencer a sus homólogos, principalmente africanos, de formular una condena oficial a la "militarización de la crisis alimentaria por parte de Rusia" en nombre de la Commonwealth. El líder canadiense también quiso “condenar la invasión ilegal de Ucrania” por parte de los jefes de Estado presentes.
Sin embargo, el comunicado final del Commonwealth simplemente dice que la "Commonwealth of Nations toma nota de la resolución de la ONU que condena a Rusia". En cuanto a la crisis alimentaria, a la que se dedicó el viernes, los Jefes de Estado africanos pidieron “promover la inversión de la Commonwealth en agricultura en África”.
Los presidentes africanos no quieren hablar de Ucrania con Trudeau
El canal canadiense CBC cree que "Trudeau hizo el ridículo" en Kigali. El cara a cara del Primer Ministro canadiense con Paul Kagame (Ruanda), Hakainde Hichilema (Zambia), Muhammadu Buhari (Nigeria), Nana Akufo-Addo (Ghana), pero también con el Director de la OMC Ngozi Okonjo-Iweala, presidente de la La comisión de la UA, Moussa Faki Mahamat, así como el presidente de la CAF, Patrice Motsepe, han demostrado sobre todo que todos los líderes africanos se niegan a tomar una posición sobre Ucrania.
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Kagame e Hichilema prefirieron, por su parte, hablar de ecología con el mandatario norteamericano. En cuanto a Akufo-Addo y Buhari, aunque aceptaron las "felicitaciones por la condena de Rusia" de Trudeau en la ONU, claramente evitaron discutir el tema.
Otros presidentes africanos, invitados a Ruanda para CHOGM 2022, se han ausentado. Filipe Nyusi de Mozambique y Yoweri Museveni de Uganda en particular. Pero, también, los nuevos miembros de la Commonwealth, Togo y Gabón, que estuvieron representados por sus Ministros de Asuntos Exteriores. Ali Bongo, por su parte, justificó su ausencia por “el rebrote de casos de Covid-19”. En cuanto a Faure Gnassingbé, simplemente tuiteó que agradecía a la Commonwealth por aceptar la membresía de su país.
Por el lado de Sudáfrica, cuyo presidente Cyril Ramaphosa también se esperaba en Kigali, otra cumbre se antepuso a la CHOGM 2022. En efecto, Cyril Ramaphosa permaneció en Pretoria, desde donde asistió por videoconferencia a los trabajos de la 14ª Cumbre BRICS. India, también miembro de la Commonwealth, se fue por la misma razón.