El cabello de los mineros de oro artesanales en el este de Camerún tiene una concentración de mercurio por encima de la norma. Esta exposición al mercurio puede tener efectos nocivos sobre los sistemas nervioso, digestivo o respiratorio.
El uso de mercurio en la minería de oro artesanal pone a los mineros y sus familias en riesgo de toxicidad a largo plazo y efectos adversos para la salud. Santé.
Esta es una de las conclusiones del estudio sobre la Evaluación de los riesgos de la minería artesanal de oro sobre la salud y la seguridad de los mineros artesanales en la región este de Camerún » realizado por la Asociación de Bosques y Desarrollo Rural (FODER) y publicado el 19 de octubre.
El estudio se llevó a cabo en Batouri, Kette, Ngoura y Bétaré-Oya, cuatro distritos de la región oriental que albergan muchos yacimientos mineros.
Su objetivo era evaluar los riesgos para la salud y la seguridad a los que están expuestos los artesanos locales de esta región y específicamente "evaluar el grado de exposición al mercurio de los artesanos locales y las repercusiones de esta exposición en su salud", dice Ralph Obase Musono, autor principal de este estudio.
Ciento treinta y cuatro (134) mineros participaron en la encuesta. Se tomaron sesenta (60) muestras de cabello, incluso de quemadores de amalgama y colectores de oro, y luego se analizaron.
Los resultados obtenidos muestran que en el 71,1% de los artesanos testeados, la concentración total de mercurio en el cabello es superior al límite recomendado por la OMS.
Según Ralph Obase Musono, el nivel de concentración de mercurio en el cabello recomendado internacionalmente es de 1 mg/kg.
amalgama
El mercurio se utiliza en la minería artesanal para obtener una amalgama (una mezcla de oro y mercurio).
Luego, esta amalgama se calienta para recolectar "un máximo de oro", explica Justin Chekoua, gerente de proyecto y gerente de programa. biodiversidad, minas y medio ambiente en FODER.
La principal forma de exposición es la inhalación durante la combustión de los empastes de amalgama y por contacto físico (piel y mucosas) durante la manipulación directa del mercurio, precisa el estudio.
Su uso es particularmente peligroso y el impacto en la salud es significativo. Según Ralph Obase Musono, los artesanos entrevistados durante la encuesta afirmaron experimentar muchos síntomas, como fatiga inusual, sueño excesivo, temblores, dificultades auditivas y visuales y pérdida del sentido del gusto.
Cuestionado por SciDev.Net, Fernand Ombolo, presidente de la asociación de médicos SOS-Camerún, confirma que el mercurio puede ser bastante tóxico para el organismo más allá de ciertas dosis recomendadas.
Según sus explicaciones, este elemento químico puede atacar a varios. En particular, el sistema urinario (insuficiencia renal), digestivo (las complicaciones pueden manifestarse como diarrea, vómitos, trastornos del tránsito) y neurológico (trastornos de la vigilia y del sueño e incluso daños neurológicos mucho más graves).
Continúa señalando que el mercurio también puede afectar el sistema respiratorio si se encuentra en forma de vapor.
“En ese momento, tenemos depósitos en los pulmones que causarán infecciones pulmonares, insuficiencia respiratoria cada vez más grave. También puede haber la aparición de cánceres de la sangre como la leucemia”, dice Fernand Ombolo.
Equipamiento
Para Justin Chekoua, los resultados del estudio deberían atraer la atención de los tomadores de decisiones para que analicen este problema. Sobre todo porque “revelan que el mercurio tendrá efectos nocivos a largo plazo en la salud de los artesanos locales por el alto contenido de este metal en su organismo”, explica en entrevista con SciDev.Net.
Sin embargo, el uso de mercurio en la extracción de oro está prohibido en Camerún. Pero, explica Justin Chekoua, desde su introducción en este sector, es casi imposible pedirle a un artesano que no lo use.
Evelyne Ngo Nyeck, ejecutiva de la Brigada Nacional de Control de la Actividad Minera del Ministerio de Minas, Industria y Desarrollo Tecnológico (MINMIDT), reconoce la dificultad de hacer cumplir en el terreno la decisión del Ministerio de Minas.
Según ella, las largas distancias entre las distintas delegaciones departamentales del MINMIDT y los sitios operativos, así como la falta de medios de transporte “no nos permiten ser eficientes”.
Sin embargo, en cuanto a las consecuencias del mercurio en la salud, especifica que las acciones realizadas se refieren a la “concienciación de los artesanos”.
Además de crear conciencia, Justin Chekoua también aboga por el uso de equipos adecuados. “Como es difícil que puedan prescindir de él, lo que hay que hacer es sensibilizarlos para que puedan usar el equipo de protección personal…”, sugiere.
Abundante en la misma dirección, Fernand Ombolo recomienda el uso de máscaras adecuadas y una reducción de la exposición al mercurio, por ejemplo, reduciendo el tiempo de trabajo.
También piensa que los médicos ocupacionales equipados con el equipo necesario podrían monitorear la cantidad de exposición al mercurio en estas áreas mineras.
“Porque puedes estar expuesto al mercurio sin desarrollar patologías; pero si la exposición va más allá de las cantidades permitidas, hay mayor riesgo de tener complicaciones”, agrega.
Dupleix Kuenzop, secretario ejecutivo de la ONG Dynamique mondial des jeunes, dice que el estudio realizado por el FODER es "oportuno" porque "permite tener un panorama real de lo que se está haciendo sobre el terreno en términos de trabajo pero sobre todo en cuanto a los riesgos a los que están expuestos los mineros artesanales de oro”.
Para impulsar el cambio, especifica que se necesita un marco más restringido para las discusiones con los ministerios involucrados.
Entonces, “es importante involucrar a las poblaciones de estas localidades en este marco para que tengamos una masa crítica de actores capaces de hablar de un mismo tema…”, dice.
También es necesario, según él, concienciar a las poblaciones sobre la peligrosidad de sus actividades. “Y cuando tomen conciencia, estamos seguros de que en los marcos de consulta podemos influir en los decisores”, sugiere Dupleix Kuenzop.
Este artículo fue publicado en la versión francesa de SciDev.net y se reproduce con su permiso.