El Ministro de Relaciones Exteriores de Suecia anunció el viernes que Suecia se retiraría de la fuerza Takuba. Un anuncio que preocupa al bando de Francia, que busca unirse en torno a Takuba, tras el anunciado final de Barkhane en Malí.
El contingente sueco de la fuerza Takuba se retirará antes de que finalice el primer trimestre de 2022. Así lo anunció la ministra de Asuntos Exteriores, Ann Linde, al margen de la cumbre de sus homólogos europeos en Brest este viernes 14 de enero. “Ya hemos decidido que dejaremos la fuerza de Takuba este año”, anunció Linde.
Por su parte, el jefe de la diplomacia francesa, Jean-Yves Le Drian, asegura no obstante que "no hay salida, simplemente la aplicación de los compromisos adquiridos por Suecia con respecto a la comunidad internacional". Según los informes, "fuentes militares" dijeron a la prensa francesa que "los oficiales suecos deberían seguir comprometidos con Takuba".
Sin embargo, la principal contribución sueca a Takuba en Malí se reduce a la presencia de oficiales del ejército: 150 oficiales, incluidos pilotos y comandos, y 250 artilleros. Una contradicción que delata el verdadero motivo del pánico de Suecia por un lado y de Francia por otro ante esta noticia.
De hecho, el nuevo comandante de Takuba, el coronel Peter, es sueco. También es el primer comandante no francés de Takuba. Una forma de añadir "legitimidad europea" a Takuba para Francia. Así, la retirada de Suecia, en plena tensión entre Malí y Francia, amenaza por un lado la sucesión de Takuba en Malí, pero también anuncia un gran cambio de contexto en el Extremo Norte.
El apoyo ruso a Malí pone freno a Takuba
De hecho, si Francia puede prescindir efectivamente de la contribución sueca a Takuba, la diplomacia francesa teme perder en otro expediente diplomático que involucre a Suecia y Rusia. Preguntada por la prensa este viernes, Ann Linde dijo: "Ahora sabemos que está el grupo Wagner (en Malí, nota del editor)... y si gana influencia, no podremos seguir desplegando una gran cantidad de soldados".
Pero si los medios franceses interpretan estos comentarios como una oposición de Suecia a la muy hipotética presencia de Wagner en Malí, oa la intervención de Rusia en el país, la realidad es bien distinta.
Suecia y Finlandia habían, con motivo de la conferencia de defensa de los países escandinavos, el miércoles 12 de enero, expresado a medias sus dudas en cuanto a su posible adhesión a la OTAN. ¿Qué relación con Takuba? Bueno, la OTAN obtuvo, tras un acuerdo entre Florence Parly y la NSPA, la exclusividad en los contratos de armas de Takuba.
Todo esto se debe al statu quo en torno al expediente ucraniano. Rusia rechazó, el 17 de diciembre, que nuevos miembros se integren en la OTAN. Esto llevó a Suecia y Finlandia a reconsiderar su posición.
La estrategia de seguridad de Suecia se vería totalmente comprometida si la OTAN accediera a abstenerse de una mayor expansión y reducción de algunas de sus actividades en Europa, como exige Rusia, dice el máximo comandante militar de Suecia.https://t.co/NK2AxWtHIC pic.twitter.com/MRhkbNVMWl
- CORTE CORTE) Enero 11, 2022
¿Teme Suecia las represalias de Rusia?
¿Cómo influiría esta intriga en el expediente maliense? Sencillamente porque, tanto en Europa como en África, los países escandinavos tienen una tradición diplomática de evitar a toda costa pisar los pies a Rusia. Además, Rusia ha amenazado claramente a los dos países escandinavos. De hecho, la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, Maria Zakharova, había declarado que “la adhesión de nuevos países (a la OTAN) tendría graves consecuencias militares y políticas”. Y si Suecia cuenta con el apoyo de muchos países occidentales en la frontera con Ucrania, este no es el caso de Malí.
De hecho, si Suecia toma el mando de Takuba en Malí, como estaba previsto, teme encontrarse frente a Rusia. Y si algo nos enseña el contexto maliense es que Francia no invierte grandes esfuerzos para apoyar a sus aliados militares.
Sin embargo, Suecia no puede darse el lujo de molestar a Moscú, y su autoproclamada identidad europea no cambia la dependencia energética del país escandinavo de Rusia, que es vital en el país.
Actualización: Maria Zakharova, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia: "Es bastante obvio que la ascensión de Finlandia y Suecia a la OTAN tendría graves consecuencias militares y políticas que requerirían una respuesta adecuada de Rusia".
— EndGameWW3 (@EndGameWW3) Enero 1, 2022
¿Qué pasa con Argelia y Mauritania?
Por otro lado, los medios franceses multiplican los anuncios de la ampliación prevista de Takuba a principios de año. Pero mientras varios países, como Rumanía y Estonia, contribuyen como máximo con unas pocas decenas de soldados al grupo de trabajo, es sobre todo la contribución de Portugal, Alemania y España lo que París busca asegurar. Pero la contribución de los tres países es cada vez más improbable, especialmente en ausencia del apoyo africano a Takuba.
En efecto, siguiendo el embargo impuesto a Malí por los países de la CEDEAO, este último ya no puede apoyar abiertamente la “europeización” de la lucha contra el terrorismo a la que llama la ministra francesa de las Fuerzas Armadas, Florence Parly. Nunca la CEDEAO se había expuesto tan diplomáticamente a Francia como cuando aprobó las nuevas sanciones para Malí. El organismo ya está en desgracia a los ojos de la mayoría de las poblaciones de África Occidental, y traducir militarmente la hegemonía francesa en su toma de decisiones podría ser una decisión de más.
Tampoco debemos olvidar la posición de Mauritania y Argelia. Los dos países tendrán que decidir, tras acoger este sábado y domingo a una delegación maliense, su posición final sobre las sanciones de la CEDEAO, de las que también dependerá el futuro de la presencia militar europea en Malí.
Para el exministro maliense Hama Ag Mahmoud: “Estos países tradicionalmente no están en estos juegos. Y creo que siempre han fomentado las relaciones con los países vecinos. Argelia, Mauritania e incluso Marruecos, no creo que estos países entren en esta lógica de sanciones”.
Sobre todo porque, del lado argelino, el estado ha afirmado repetidamente su voluntad de apoyar militarmente a Bamako, o incluso de reemplazar a Barkhane. En cuanto a Mauritania, el aislamiento de Malí representa una oportunidad inesperada para el comercio mauritano, pero también para mejorar las relaciones entre Bamako y Nouakchott.
📍MALI: ¡Después de GUINEA CONAKRY, ARGELIA y MAURITANIA declaran que no cerrarán sus fronteras con MALI!#SENTINELSOFFRICA pic.twitter.com/eeZK5L4ubV
— Centinelas de África (@DSentinels) Enero 11, 2022