Una declaración del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, redactada por Francia y que aprueba las sanciones de la CEDEAO contra Malí, fue bloqueada por los representantes de China y Rusia.
Rusia y China han vetado un borrador de comunicado de prensa redactado por Nicolas de Rivière, el embajador de Francia ante las Naciones Unidas. La declaración fue para expresar el apoyo de la ONU a la Comunidad Económica de los Estados de África Occidental (CEDEAO), que ha sancionado severamente a Malí.
Esta declaración redactada por Francia iba a ser presentada por los tres miembros africanos del Consejo de Seguridad: Kenia, Ghana y Gabón. Un intento de París, respaldado por Estados Unidos, según el New York Times, para humillar aún más a Malí.
El embajador de Kenia ante la ONU, Martin Kimani, dijo que estaba "decepcionado de que el Consejo no pudiera ponerse de acuerdo" sobre lo que llamó un "comunicado de prensa inofensivo". Kimani también expresó su apoyo a estas "sanciones contra las autoridades militares de Malí para garantizar un retorno acelerado a la legitimidad".
Francia avanza con la cara descubierta
El pasado domingo, tras una doble cumbre de la CEDEAO y la UEMOA, el bloque de África occidental había decidido romper relaciones con Malí. Una decisión acompañada de varias medidas, como la suspensión de la mayoría de las transacciones comerciales, el cierre de las fronteras terrestres y aéreas, y la congelación de los activos malienses con el banco regional, el BCEAO.
Una decisión que llega después de que el Gobierno de transición de Malí propusiera, en diciembre, permanecer en el poder hasta 2026, antes de la celebración de elecciones. La propuesta de Malí contrasta con la voluntad de la CEDEAO, esta última ha dado un paso al frente y se ha enfrentado a Bamako. Una sorpresa, sobre todo porque el aislamiento de Malí claramente no sirve a los intereses de esta misma CEDEAO.
Francia, una antigua potencia colonial, que ocupa la presidencia rotatoria de la Unión Europea, afirmó rápidamente su apoyo a las sanciones de la CEDEAO. Según la mayoría de los medios, estas sanciones fueron dictadas por París.
"Apoyamos la posición clara y firme" de la CEDEAO "que marca la profunda condena de los abusos de la junta militar que Francia había denunciado en repetidas ocasiones", El presidente francés, Emmanuel Macron, dijo Martes.
Por parte estadounidense, la embajadora de las Naciones Unidas, Linda Thomas-Greenfield, declaró que “una transición de cinco años no beneficia a los malienses y prolonga el dolor del pueblo”.
China, Rusia y Argelia apoyan a Malí
Ante esta presión occidental y su relevo por parte de la CEDEAO, China y Rusia han tomado una posición. El embajador chino ante la ONU, Dai Bing, instó a "las potencias extranjeras a abstenerse de ejercer una presión indebida sobre los países de África occidental". Destacó el hecho de que "Malí atraviesa un período de transición crítica" y que la comunidad internacional debería ser "más constructiva".
Por parte rusa, el embajador de Moscú ante la ONU, Vassily Nebenzia, declaró: “Entendemos y somos conscientes de las dificultades encontradas por las autoridades malienses en la preparación de las elecciones legislativas”. Y el diplomático ruso continuó: "Estamos de acuerdo con el hecho de que en ausencia de la restauración del control estatal en muchas regiones de Mali, sería difícil considerar una elección como legítima".
Una forma de que la diplomacia rusa no solo se oponga a la acusación occidental, sino que también apoye la hoja de ruta de Bamako.
Argelia, uno de los dos países que comparten sus fronteras con Malí y no forma parte de ECOWAS, instó a este último a ser más flexible. “Argelia abogó por un diálogo sereno con la CEDEAO (…) que tenga en cuenta los factores endógenos vinculados a la dinámica nacional maliense”, declaró la presidencia argelina. En el mismo comunicado de prensa, Argelia advierte contra "los graves riesgos y dificultades que conlleva la panoplia de sanciones masivas" de la CEDEAO.